El amor que nos nació en el alma
en el río se nos reflejaba
y esperando que rompiera el alba
sobre el agua yo sentí que el sol
se dormía entre tus lindos ojos
ay mi niña del amor tan dulce
muchachita del amor pueblero
yo te amaba en el amanecer.
Te tomé la mano entre las mías
y sentí el temblor de una paloma
tan pequeña tu alma de cantora
que conmigo se atrevió a volar
bautizamos nuestras alegrías
con los rayos de este nuevo día
con un beso robado a tus labios
te invité conmigo a caminar.
Llegar, partir, soñar, vivir
cantar, vibrar, llorar, reír
son las vivencias de los dos
los trashumantes del amor.
Llegar trayendo la ilusión
partir dejando el corazón
así es mi vida de cantor
que unió el destino de los dos.
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